Palabras clave: Medio ambiente, Deforestación
El impacto ambiental que se ha generado a raíz de la actividad humana, va en aumento y día con día la posibilidad de frenarlo disminuye, ya que la sociedad no es lo suficientemente capaz de entender y razonar las consecuencias que tienen sus diferentes acciones.
El cambio climático es un problema real que hemos comenzado a enfrentar y que somete al ser humano a constantes cambios, evidentemente negativos, que provocan daños a terceros. La inmensidad de este problema es enorme y es generado por diversas causas, algunas con mayor y otras con menor impacto, pero finalmente existen y tienen una repercusión medioambiental.
La deforestación es una de las tantas consecuencias generadas por las actividades desenfrenadas y algunas irracionales que practica el ser humano y que a su vez da lugar a otros problemas, sin dejar atrás el daño generado al mismo hombre.
El autor Kanninen define la deforestación como la conversión de un bosque a otra forma de ocupación espacial o como la reducción a largo plazo de la cubierta forestal. Dicho de una manera más sencilla estamos hablando de una pérdida de área verde. Es inevitable mencionar que la deforestación no solo puede ser causada por acción humana, sino también por accidentes naturales y eventos propios de la dinámica terrestre, ejemplo de ello son las erupciones volcánicas y tornados.
Actualmente se tiene bien reconocido que la acción natural origina una parte significativa de la deforestación, puesto que las actividades humanas son las responsables de la mayor parte del problema.
La ganadería es una actividad que consiste en la cría, tratamiento y reproducción de animales domésticos con fines de producción para el consumo humano. El impacto que tiene esta actividad se relaciona con la degradación y fragmentación del hábitat, al tener constantemente a los animales en una misma área, el pisoteo aumenta la degradación de los pastizales y la erosión del suelo. Hoy en día se cuenta con sistemas intensivos que evaden por completo dicha situación, sin embargo, se sabe perfectamente que los sistemas extensivos siguen existiendo ya que representan una forma de subsistencia para muchas familias.
Las empresas madereras y las fabricadoras de papel y sus derivados comparten la responsabilidad junto con la ganadería, las dos primeras se dedican a la tala inmoderada de árboles. Aunque hoy se tiene regulado este ámbito, se sabe también que la cantidad de materia prima que se requiere para obtener los productos finales de las empresas ya mencionadas es inmensa y desafortunadamente los intereses personales de cada eslabón que participa, deja a un lado la parte ecológica.
Recientemente la obtención de aceite de palma ha adquirido mucha importancia en cuestiones medioambientales, ya que diversos análisis e investigaciones arrojaron que para conseguir el aceite se necesita acabar con bosques completos, dando lugar a la deforestación.
Tal como se mencionó con anterioridad, la deforestación es una problemática que impacta directamente al ser humano en diversos ámbitos. Al terminar con los bosques, no solo se da muerte a los árboles, sino también a los animales que habitan la zona o región, puesto que pierden su entorno, motivo por el cual se ven obligados a desplazarse a otros lugares que pueden o no permitir su supervivencia, requieren adaptarse de manera brusca a climas, alturas y en general a características geográficas que seguramente no son de su agrado, por lo que muchos de ellos no logran subsistir. Desafortunadamente este panorama puede ser de los mejores, mientras que uno peor nos obliga a ver a los animales morir desde un principio, tal es el caso del proceso de obtención de aceite de palma, en donde se quema gran parte del hábitat y con ello los animales.
De manera concreta puedo afirmar que al dar fin a la flora, también damos fin a la fauna y entonces ya no solo enfrentamos un problema de deforestación, sino que también comenzamos a notar una disminución en el número de ejemplares de ciertas especies, que posteriormente se colocan en una categorización llamada “en peligro de extinción” para que finalmente se consideran “extintas”.
Si somos más específicos y profundizamos más en el tema, recordaremos que cada especie tiene una función biológica dentro del ecosistema, es decir, es un eslabón dentro de una cadena alimenticia, al desaparecer una especie se estará alterando de manera negativa dicha cadena y entonces se originara un desequilibrio que tendrá a su vez, otras repercusiones.
Muchas veces pasamos por alto una de las funciones más importantes de los bosques, específicamente de los árboles y es que aunque parece algo fácil y sencillo, una cuestión que siempre se enseña y explica desde educación básica, olvidamos que los árboles son los encargados de aportar oxígeno, un gas fundamental para la sobrevivencia de los seres humanos y animales.
El párrafo anterior justifica perfectamente la razón por la que las grandes ciudades, que en su mayoría carecen de educación ambiental, continuamente enfrentan altos niveles de contaminación, los cuales muchas veces son dañinos para la salud de las poblaciones, afectando aún más a grupos vulnerables (infantes y ancianos).
Si nuevamente profundizamos, las partículas de contaminación comenzarán a generar daños en vías respiratorias, afectando notablemente la calidad de vida, este será un problema que los sistemas de salud tendrán que solucionar, a partir de un aumento económico destinado para dicho sector, además de invertir tiempo y personal que se dedique a atender las necesidades correspondientes.
El desenfrenado crecimiento de la población, es sin duda, una situación que nuevamente da origen a la pérdida de bosques, ya que al aumentar el número de personas, tendrá que aumentar el número de viviendas, lo cual obliga a la mancha urbana a extenderse, destruyendo así, hábitats naturales que albergan a otros seres vivos y que evidentemente tendrán que ser desplazados. En el momento en el que los sistemas de gobierno logren controlar la natalidad de la población, no solo controlan la forma en la que se extiende, si no su educación, su calidad de vida, oportunidades de trabajo, etc. Por otro lado, también se tendrá oportunidad de prevenir situaciones de salud pública, tal como las pandemias, que muchas veces se originan por el estrecho contacto que tienen los humanos con los animales silvestres y que en este caso se relaciona por la invasión del hombre en regiones no habitables.
Actualmente las cifras que indican la cantidad de terrenos deforestados a nivel mundial son asombrosas e indirectamente pueden ser una invitación a reflexionar sobre nuestras actividades. Es posible que aparentemente no estemos involucrados, sin embargo, si analizamos nuestro entorno podremos descubrir pequeños detalles de nuestra vida cotidiana que seguramente podrán continuar perjudicando, o bien, podrán sumarse en apoyo, como es el caso de los alimentos elaborados a base de aceite de palma.
Indudablemente es muy complicado atacar el problema de raíz, es decir, es bastante complejo eliminar todos los factores que dan lugar a terrenos deforestados, sin embargo, es necesario buscar soluciones que disminuyan el impacto, como por ejemplo, los sistemas intensivos, que ya se mencionaron en su momento con el tema de la ganadería, estos sistemas además de dar lugar a problemas terrestres representan una baja productividad a comparación de los intensivos, ya que en este último, el control que se tiene de los animales es mucho mayor, por lo que ni siquiera es redituable en términos económicos y productivos contar con sistemas extensivos. Otra solución similar son los sistemas agrosilvopastoriles que cuentan con estrategias de producción que integran distintos componentes buscando mejorar el uso del suelo, la productividad y la sostenibilidad económica, ambiental y social.
Con respecto a las empresas productoras de papel y madereras, podríamos dar solución consumiendo menos productos finales, es decir, procurar reutilizar hojas o materiales similares que estén a base de papel, así como evitar adquirir productos fabricados de madera innecesarios y explotar aquellos que ya tenemos como propios.
A manera de conclusión puedo decir que la deforestación es un problema de impacto ambiental que evidentemente es parte del cambio climático, el cual aseguran que día con día tiene mayor influencia en la vida del ser humano y que muy probablemente terminará por acabar con gran parte de la población a nivel mundial.
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